Acné
El acné es, con mucha probabilidad, la patología dermatológica más frecuente especialmente en la adolescencia que afecta a las zonas ricas en folículos sebáceos (frente, mejillas, nariz, espalda...).
En el acné se produce seborrea (hipersecreción de grasa), dando lugar a la formación de comedones, que suelen inflamarse y originar pápulas, pústulas, nódulos e incluso quistes y abscesos que suelen dejar cicatrices.
Hay diferentes factores que intervienen en la aparición del acné: hereditarios, bacterias, hongos, hormonas…
Las manifestaciones clínicas son variables según el grado de acné, así como su tratamiento.
El tratamiento debe ir dirigido a corregir los factores causantes en primera instancia y a evitar las posibles lesiones residuales o cicatrices. Se debe cuidar la higiene y no hay que descuidar la alimentación. Los peelings químicos médicos son muy efectivos puesto que no sólo mejoran las lesiones ya existentes sino que actúan también modulando la actividad de las glándulas sebáceas. También son útiles diferentes cremas cosmético-farmacológicas y en ocasiones es necesario prescribir además tratamiento via oral.
Cuando el acné ya ha dejado cicatrices son efectivos los tratamientos con ácido hialurónico que permiten mejorar muy considerablemente las retracciones producidas así como la calidad de la piel. Los peelings químicos también son eficaces en el tratamiento de las cicatrices.
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